La pequeña, que luchó contra una cardiopatía congénita, dejó un legado de amor y conciencia sobre la donación de órganos.
En el Día Mundial del Corazón, su madre anunció su fallecimiento y pidió ayuda para los gastos finales, destacando el deseo de libertad para Eka.
La comunidad de Comodoro Rivadavia, Chubut, se encuentra de luto tras la triste noticia del fallecimiento de Ekatherina, una valiente niña que, con apenas unos años de vida, marcó los corazones de miles con su lucha contra una grave cardiopatía congénita. Su madre, a través de un conmovedor mensaje en Instagram, compartió la pérdida en una fecha simbólica: el 29 de septiembre, Día Mundial del Corazón. “No es casualidad que Eka haya elegido este día para trascender. Porque está en todos nuestros corazones, y su legado será amor, compasión y empatía. Te amamos, hasta el fin del mundo y el comienzo de los cielos”, escribió.
Ekatherina, conocida cariñosamente como Eka, estuvo internada durante 14 meses en el Hospital Italiano de Buenos Aires, en emergencia nacional a la espera de un trasplante de corazón que nunca llegó. Su condición se agravó drásticamente en julio de 2025, lo que movilizó a su familia, amigos y a toda una comunidad que se unió para visibilizar la importancia de la donación de órganos pediátricos. A pesar de los esfuerzos y la esperanza que mantuvo viva a la pequeña, su cuerpo no pudo resistir más.
En su mensaje, la madre de Eka también expresó el deseo de la familia de optar por la cremación, “para que finalmente pueda ser libre”, y solicitó ayuda económica para cubrir los gastos asociados al proceso. “A todo aquel que nos pueda ayudar por última vez, con los gastos de todo lo que se viene, les agradezco de todo corazón”, añadió, en un pedido que resonó en redes sociales y medios locales, como La Radio de la Cordillera 105.5 FM, que dedicó un segmento especial a la memoria de Eka y a la concientización sobre la donación de órganos.