Comodoro no da respiro. Esta mañana, a las 10:10, mientras los policías de la Comisaría Segunda hacían un control de rutina en Juan B. Justo y Av. Hipólito Yrigoyen, cayó un fugitivo que parecía sacado de una peli de Hollywood, pero con menos presupuesto. El hombre identificado como H.C.E. de 43 años, estaba tranqui caminando por la calle, como si no tuviera un pedido de captura y rebeldía pegado en la frente.
Los canas, más atentos que vos cuando se cae el Wi-Fi, le pidieron los datos y, al chequear en el sistema, ¡bingo! El amigo tenía una orden judicial más caliente que el asfalto en enero. Ni lerdo ni perezoso, el personal policial lo esposó y lo subió al patrullero sin darle tiempo a inventar una excusa digna de telenovela. Por orden del Dr. Alejandro Soñis, el detenido ya está rumbo a la oficina judicial para una audiencia de control de detención, donde seguro no va a poder zafar con un “no fui yo, jefe”.