Corré, pero no te escondas: en Comodoro Rivadavia, la policía le puso las esposas a un tipo de 35 años que jugaba al gato y al ratón desde abril. Lo pescaron este jueves en el barrio Edisur, Kilómetro 8, con un pedido de captura más pesado que el viento patagónico. ¿El delito? Robos, agresiones y una amenaza agravada que lo mandaron directo a la Alcaidía. Más atrapado que vos buscando señal en la ruta 3.
Cazando prófugos en Comodoro: misión cumplida
La División Búsqueda de Personas de la Policía de Comodoro se anotó un poroto grande. Los efectivos ubicaron al prófugo en Kilómetro 8, un barrio donde el viento y los pozos compiten por quién te complica más la vida. El tipo, con una condena de dos años firmada por el juez Martín Cosmaro, no tuvo chance de hacerse el vivo. “Lo reducimos a la inmediatez”, tiró el subcomisario Patricio Rojas, jefe de la división, con tono de quien no deja lugar a excusas.
El operativo fue más rápido que un delivery en hora pico. El sujeto, que ya tenía antecedentes por delitos contra la propiedad y las personas, sumó una causa reciente por amenazas agravadas. O sea, un CV delictivo más largo que la cola en el súper un viernes. La orden del juez fue clara: directo a la Alcaidía, sin escalas ni Netflix.
Prófugo en Comodoro: ¿dónde te metiste todo este tiempo?
El tipo se las ingenió para esquivar a la poli desde abril, cuando se emitió el pedido de captura. Según Rojas, en un allanamiento el 3 de septiembre en la misma zona dieron con las manos vacías. “Puede ser que haya burlado el trabajo investigativo”, admitió el subcomisario. Pero en Comodoro, donde todos se conocen y el viento no te deja olvidar nada, no podés esconderte para siempre. Finalmente, lo encontraron en Kilómetro 8, donde parece que se movía como pez en el agua.
Y no es que el tipo fuera un angelito. La policía lo marcó como “de alta peligrosidad”, aunque en el operativo no tuvo ni tiempo de pestañear. ¿Moraleja? Podés correr, pero en Comodoro la justicia te alcanza, aunque sea más lento que el colectivo en hora pico.
La División Búsqueda de Personas: no solo desaparecidos
“Colaboramos con las detenciones de quienes son solicitados por el Ministerio Público Fiscal”, explicó Rojas. Y no es chamuyo: en solo un mes al mando, el subcomisario ya está revisando causas abiertas, desde desapariciones hasta tipos como este que creían que podían seguir libres como el viento.
En Comodoro, Trelew o Madryn, la historia se repite: la policía no duerme, aunque a veces parezca que el sistema judicial va más lento que una tortuga en la playa. Esta detención es una señal de que, al menos, alguien está poniendo orden en el caos.